LA MAGIA ES ILUSION

I

"Desde comienzo de los años veinte, Picasso comenzó a hacer afirmaciones oraculares acerca del arte. Al ser tratado como mago -en el sentido a la moda de la palabra- empezó a descubrir dentro de sí una base mágica más seria en su trabajo.

La esencia de lo mágico es la creencia primitiva de que la voluntad puede controlar las fuerzas latentes y los espíritus que residen en todos los objetos y en toda la naturaleza. El poder de hechizar y el estar poseído son los grados supersticiosos de esa creencia remota.

Frazer, en La rama dorada, define la magia como la confusión de una relación ideal con una real.
Los hombres confunden el orden de sus ideas con el orden de la naturaleza, y de aquí imaginan que el control que ellos tienen de sus pensamientos les permite ejercer otro control correspondiente de las cosas.

La magia es ilusión. Pero su importancia en el mundo moderno no debe ser subestimada. En cierta medida, todo arte deriva su energía del impulso mágico; del impulso de dominar el mundo por medio de la palabra, el ritmo, las imágenes y los signos. También llevó la magia al hombre a los comienzos de la ciencia. Y hoy la ciencia confirma, si no la práctica, cuando menos algunos conceptos de la magia. El concepto de la acción a distancia, era fundamental en la magia. También lo era la convicción de que la realidad es indivisible. La magia ofrecía un plano del universo unificado, donde la división - y, por lo tanto, la alienación- era imposible. Este plano que no tenía más solidez que un sueño, se ha convertido ahora en una aspiración científica. La magia puede ser una ilusión; pero, en el fondo, lo es menos que el utilitarismo." (1)

(1) John Berger, Fama y soledad de Picasso. Ed Alfaguara.

II

Picasso dibuja al Minotauro, figura mitico-poética de la cultura del mediterraneo.
Sostiene Cortazar en Los reyes, que el Minotauro es la figura en sueños de ese ser extrañado que es el poeta. Y en boca del Rey Minos Cortázar dice:

"La nave llegará cuando las sombras, calcinadas de mediodía, finjan el caracol que se repliega para considerar, húmedo y secreto, las imágenes de su ámbito en reposo. ¡Oh caracol innominable, resonante desolación de mármol, qué fosco silencio discurrirán tus entrañas sin salida!
Allí mora, legítimo habitante, esta tortura de mis noches, Minotauro insaciable. Allí medita y urde las puertas del futuro, los párpados de piedra que su sagaz perfidia alza contra mi trono en la muralla. Mis sueños aguzados de astas. Todo remo me es cuerno, toda bocina mugir. ¡Minotauro, hijo de reina ilustre, prostituida! Nadie hallará el artificio armonioso capaz de medir sin engaño un temor de rey.
Minotauro, silencio en acecho, signo de mi poder sobre la concavidad del mar y sus ramos de azules islas. Testimonio vivo de mi fuerza, del filo abominable de la doble hacha. ¡Sí, preso y condenado para siempre! Pero mis sueños entran al laberinto, allí estoy solo y desceñido, a veces con el cetro que se va doblando en mi puño. Y tú adelantas, enorme y dulce, enorme y libre. ¡Oh sueños en que ya no soy el señor!
Los sueños, también tarea real. Contra cada noche voy subiendo en odio hasta preferir tu muerte a toda proclamación de gloria en otras playas. Reinar en mí, oh última tarea de rey, oh imposible!" (2)

(2) JULIO CORTÁZAR, Los reyes, Colección Julio Cortázar, Ed. Alfaguara.
imagen Minotauro y mujer durmiendo, dibujo de Pablo Picasso.

III

Picasso como mago y torero...
La figura del torero con su traje de luces de colores múltiples, Rey coronado con su sombrero de forma de 8 acostado, "el infinito", portando su vara-espada para matar a la bestia... Su cetro, signo de su poder, entra en el juego de la vida y la muerte, capaz de medir sin engaños un temor de rey... Entra en el laberinto para matar a la bestia. Es también análoga a la lucha del creador con su obra... lucha en el fondo imposible, pues el creador es siempre El derrotado; "reinar en mí, oh última tarea de rey, oh imposible" dice sabiamente Minos en las palabras de Cortázar...
Analogía con la carta del mago del juego del tarot.
Seguramente Picasso a através de su relación con Bretón y los surrealistas a comienzo de los años veinte, no desconocía el significado del juego y de la carta. El mago coronado con un sombrero con forma de infinito, porta su vara mágica frente a los cubiletes y dados del azar...
El mago-artista, el mago-creador, el que lucha con la obra, en ese  juego ilusorio, siempre si, por encima del mero utilitarismo... La magia es ilusión...

El Matador, de Pablo Picasso.
Le Bateleur "EL mago" carta del juego del tarot.