viernes, 3 de julio de 2009

Casa Pauson










Frank Lloyd Wright proyecta y construye en el desierto de Arizona (USA) esta casa para Rose Pauson en 1940. Y Phoenix, Arizona, "es el sitio más maravillosos de la tierra" según palabras del propio arquitecto. Lugar enmarcado por sierras que se pierden en el vasto horizonte, cuya tierra es una piedra de color rosaceo oscuro y su única vegetación "los cactus".
El sitio es inmenso como todo el territorio americano, lo cual hace que la mediación entre la escala doméstica y el territorio sea un problema fundamental para dar respuesta con la arquitectura.
Wright decide que la obra emerga de la roca como si de una nave encallada se tratara, como si hubiese estado allí por siempre.
Y resulta interesante como el arquitecto crea una sútil relación de escalas al aproximarse a la casa.
La misma se sitúa en el borde más alto de una ladera, a la que hay que ascender para aproximarse. Y a medida que se asciende la presencia del muro de piedra se haca cada vez más contundente comprimiendo el espacio de alrededor. Llegamos a una pequeña abertura en el muro de piedra que enmarca al desierto.
Atravesamos la misma, pasamos por debajo de la casa y llegamos al balcón. Del otro lado la casa es de madera y los parapetos de piedra del balcón nos permiten asomarnos
y ver "el sitio más maravillosos del mundo" en toda su dimensión.
El mirador nos obliga a doblar a la derecha y recien ahí ingresamos propiamente a la casa...
Se trata de la clásica directriz de eje quebrado que encontramos en la arquitectura árabe reinterpretada en clave americana...
No es una caja transparente, ni continua, ni desterritorializada, por el contrario la idea de refugio "sólido como una roca", discontinuo con sus ejes quebrados e implicado con la tierra, hacen de la obra un manifiesto contrario a los paradigmas del estilo internacional...
Es una casa para "un americano" que vive en el desierto en relación a su inmensidad.
La casa es la revelación de un modo de habitar de un hombre y su mundo, un verdadero lugar como lo es toda obra de arquitectura que aspira a ser arte.
Wright decía: "una casa será más un hogar si a la vez es una obra de arte"...
Desgraciadamente "la perfección de la obra y su contingencia" la condenó a un incendio prematuro que consumió la obra unos años más tarde...
Sólo las ruinas de piedra persisten hoy en día...

No hay comentarios: