sábado, 4 de septiembre de 2010

PUNTA INDIO Viaje 2-LUIS CHICO



















Llegamos a la estancia Luis Chico frente a la costa del RÍO DE LA PLATA a la altura de la Bahía de Samborombón en el transcurso de nuestro segundo viaje a Punta Indio.
Luis Chico es una obra paradigmatica del eclecticismo arquitectónico argentino.
Se trata de un establecimiento rural que data de 1895 con 2763 hectáreas frente al Río. Luis Chico debe su nombre seguramente a algún poblado del lugar, hace alrededor de dos siglos atrás. Sus campos fueron originariamente pertenencia del Rincón de Noario, y en la testamentaría de doña Manuela Fernández de Piñeyro, hija de don Juan Noario, en 1834, se establece que en esa circunstancia era propietaria de varios campos en Magdalena y Chascomús, entre ellos el Rincón de Noario.
Esta zona ribereña cerca de la desembocadura del Samborombón, fue lugar de seguro refugio de muchos "malandras" que huían de la ley. En mapas del siglo pasado se señala a Luis Chico y más al sur Juan Gerónimo de Muñiz Barreto por donde se hallaban los montes de Luis Grande. Originalmente la extensión total de los campos oscilaba alrededor de las 240.000 has o sea 96 leguas. Boucau levantó en el sitio una casa considerada tan extraordinaria que se hablaba del ¨palacio¨. Boucau trazó un parque y la ubicación de su casa cerca de la costa, lo que permitió llevar en barcazas los muebles, obras de arte y materiales.
En París, cuando se inaugura la Exposición Internacional de 1889, el propietario y su esposa, compraron las obras de arte que obtuvieron primeros premios, y los interiores de la mansión se vistieron con los cortinados, consolas, las vajillas y la platería traídos expresamente de Europa. Hacia 1945 se decía de la estancia que toda era armonía de color, el parque con sus elegantes estatuas, el jardín español, la pileta románica con columnas. Hermosa residencia en la que no se sabía si admirar primero los Sorolla, Fígari, Pellegrini, Mancini, Fader y Bernárdez que adornaban sus paredes, las porcelanas, las colecciones de vasos alemanes, los grabados de Pallière y de Vidal, o el valioso mobiliario colonial de época con piezas de verdadero y fino coleccionista.
El Dr. Alejandro Shaw extendió el parque original y amplió su trazado, embelleciendo considerablemente, el área del parque que fuera diseñado por el arquitecto francés Carlos Thays. Además se construyeron nuevas instalaciones en la sección de trabajo, para las cabañas de vacunos de raza Shorthon; un caserío diversificado con viviendas, galpón y dependencias. La parte residencial emplazada en el corazón del monte, con una avenida muy sombreada conduce hacia la costa. El edificio de tres niveles se destaca por sus anchas galerías perimetrales a alto nivel, donde se destaca no sólo su elegante arquitectura sino el aire señorial que la circunda. Además sus balcones con balaustres, sus techos de chapa con cenefas de metal, sus escalinatas blancas, que se destacan en el centro de un hueco abierto en el bosque.
En la planta baja, semicubierta por enredaderas, se desarrollan las habitaciones de servicio, con sus puertas abiertas hacia una espaciosa galería. Es una casa de descanso de típico espíritu y estructura itálica.
En el nivel intermedio se ubica la parte de la recepción y dormitorios principales que abren la galería circundante. Arriba domina la techumbre de chapa acanalada color negro, abierta a techos por las ventanas en mansardas, y detalles afrancesados dentro del estilo italianizante del edificio. La casa se vincula con el paisaje a través de grandes escaleras de mármol que llegan a la senda oval que la separa de la arboleda.
Luis chico fue un decubrimiento mágico en el desarrollo de nuestro viaje.
Nos permitió sentir y comprender modos de habitar de otros tiempos, que fueron propios de la vasta llanura.
Las esculturas en los jardines son los testigos mudos que aún permanecen...


fotografías de Lucas Gilardi, María Elena Mariño, Jessica Brzostowski, Facundo Bence Pieres, Romina Bernabeo, Ricardo Lavia, Martín Flugelman, alumnos y docentes del taller.
Agradecemos a Mawi Shaw por abrirnos la puerta de su casa.

1 comentario:

facundo dijo...

muy buenas fotos!!