"Todo escribe a nuestro alrededor, eso es lo que hay que llegar a percibir" nos dice Marguerite Duras, para luego agregar, "escribir es intentar saber que escribiríamos si escribiésemos -sólo lo sabemos después de haber escrito"...
Y en la arquitectura sucede lo mismo.
Los arquitectos suizos Felber-Szépal, diseñan y construyen esta casa en los Alpes, que nos parece un muy buen ejemplo de cómo puede hacerse una reescritura desde la obra de otro.
Claramente el referente es Le Corbusier y sus cinco puntos construídos en múltiples villas, de las cuales la Ville Savoye de 1929 es la más famosa.
La casa de caja compacta y horadada apoyándose en el paisaje, los pilotis, la ventana horizontal, la planta libre y el plano noble en donde se desarrolla el programa tienen a este "lenguaje" como material "que escribe".
Las diferencias pasan por el tratamiento de los muros de hormigón visto, en lugar del revoque blanco y nos hablan claramente de cómo el lenguaje de los buenos arquitectos sigue siendo materia resignificada para la escritura arquitectónica, aún hoy en día...
Para más información ver http://www.felber-szelpal.ch/
1 comentario:
genial ! me encanto..
saludos
monica
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